El obispo de Concepción, Melitón Chávez, expresó su dolor por el crimen de Abigail Riquel y el linchamiento de José Guaymás, sospechoso del homicidio de la nena de nueve años. En particular, el sacerdote mostró su pesar porque “el desenlace había sido anunciado” por los vecinos, quienes se habían puesto al frente de la búsqueda del acusado.
“La Policía sabía que ese era el propósito de los vecinos, que habla del hastío, cansancio, angustia y tantos sentimientos que la gente en general tiene. Lamentablemente, tomaron esa opción para apagar un hecho de violencia tan extrema, porque Abigail ha sufrido una violencia extrema en soledad e indefensa”, expresó en una entrevista con “LA GACETA Central”.
El referente de la Iglesia Católica aclaró que esa "violencia extrema no puede quedar en manos de la gente". “Una cosa es hacer una protesta, salir a la calle, y otra es haber ido como lo anunciaban”, manifestó sobre el linchamiento de Guaymás. Ante ello, pidió "no naturalizar" desbordes de este tipo. "No puede ser que la gente llegue primero con la intención de hacer justicia, que no es la forma, yendo por delante del Estado", añadió.
Chávez intentó explicar esta última reacción en la pérdida de confianza en la Justicia, en el Gobierno y en la Policía. “No se actuó a tiempo, no se trabajó, no se previno ni se acompañó desde un primer momento como se debió hacer. Por eso la gente reaccionó mal”, enfatizó.
El obispo recordó distintos casos anteriores, marcados por la “ruptura” de la confianza hacia los poderes del Estado. Uno de esos antecedes fueron los saqueos en la provincia.